……y se atrevieron, y el salón, cocina y la entrada pasaron a formar un espacio unido, abierto, donde el que cocina sigue compartiendo el tiempo, conversando con el resto de la familia, donde la pequeña de la casa corretea sin puertas que salvar, donde se respira un ambiente familiar, donde la luz pasa sin barreras bañando todos los rincones, el suelo aporta calidez a la estancia, jugamos con las luces, los techos, para poder crear diferentes ambientes. En el tabique donde apoya la zona alta de la cocina un vinilo dota al espacio de fuerza y personalidad….amapolas que te mecen y te transportan a otro lugar.
El blanco unifica y da sintonÃa a toda la vivienda, cada espacio se dotó de personalidad trabajando diferentes detalles.